Búho y lechuza.

Estos dos animales tienes una larga historia como símbolos sagrados. Están entre los vertebrados más antiguos, ya que se han encontrado fósiles de más de 60 millones de años.

En la antigua Roma, tanto los búhos como las lechuzas eran conocidos como animales demoníacos de la noche. Su vuelo traía malos presagios. Cuentan… que el grito de una lechuza anunció las muertes de César, Augusto y Agripa.
Los amuletos en forma de búho o lechuza, son muy utilizados en muchos países y culturas. Los hay de diversos materiales: vidrio, cerámica, piedras preciosas o semipreciosas, cerámica, metal, madera…

Los ojos son un símbolo de inteligencia. Y son lo que más suele llamar la atención en estos amuletos. Se cree que el acto de ver tiene correspondencia simbólica con la luz espiritual y representa, en consecuencia, la comprensión.

Así pues, la representación del búho o la lechuza a través de leyendas o historias, ha prevalecido durante muchos años en las distintas culturas. Transmite sabiduría. Y por ello, se han convertido en un talismán muy valioso si tenemos alguna prueba intelectual (exámenes, etc…) o si nos dedicamos a investigar (científicamente hablando).

También se considera un poderoso amuleto contra el mal de ojo. Se aconseja llevarlo colgado al cuello, en contacto con la piel. Y se cree, que es más eficaz si nos lo regala alguien que nos quiere. Ya que se queda impregnado de las buenas intenciones de la persona. También se pueden utilizar figuras ornamentales que adornen la casa, jardín, lugar de trabajo, habitación, etc… Ya que pueden resultar muy positivas contra las energías negativas procedentes del exterior.

* Para muchos pueblos indios americanos, el búho era un espíritu protector o el depositario de las almas de los muertos.

*En la cultura francesa, si una mujer embarazada oye el grito de un búho o de una lechuza, tendrá una niña.

En la India, se afirma que tres gritos de una lechuza, anuncian la boda inminente de una de las jóvenes de la familia.

Y en Gales, se creía que el ulular de un búho era por qué una chica había perdido su “virtud”. Por eso, en esta cultura quedó asociado a acontecimientos desdichados y se convirtió en señal de mal agüero.